Son sustancias que se añaden a los alimentos para evitar que se eche a perder o para dar sabor, olor, color…, uno de sus inconvenientes para identificarlos es que pueden tener más de una denominación, por ejemplo la vitamina C también puede ser llamada ácido ascórbico o E300.
Hay sospechas sobre sus efectos en la salud de algunos de estos aditivos (no todos) aunque las autoridades sanitarias siguen diciendo que son seguros.
En definitiva, cuantos más aditivos lleve un alimento, más procesado estará y por tanto debe evitarse (cuanto más corta sea la lista de ingredientes en una etiqueta será mejor).
A continuación ponemos información para identificar el efecto de distintos aditivos:
E1 ( y 2 números más) son colorantes.
E2 ( y 2 números más) son conservantes.
E3 ( y 2 números más) son antioxidantes.
E4 ( y 2 números más) consiguen la textura deseada.
E5 ( y 2 números más) regulan la acidez.
E 620 a 635 potencian el sabor.
E 901 a 904 aportan brillo y lustre.
E 950 a 967 son edulcorantes.